La asignatura se centra en el estudio del hecho literario, sus géneros y formas, así como en la historia de la crítica literaria desde la Antigüedad hasta el siglo XIX. Como materia de primer semestre, tiene un carácter introductorio y busca que los estudiantes adquieran los conceptos y metodologías fundamentales para interpretar obras que utilizan el lenguaje como material artístico. El curso se organiza en dos bloques: el primero aborda las bases del fenómeno literario y las principales modalidades expresivas —narrativa, lírica y dramática—; el segundo, la evolución histórica de la interpretación y las metodologías críticas desarrolladas hasta el siglo XIX. Esta estructura permite comprender la literatura tanto en su especificidad estética como en su dimensión histórica, favoreciendo una visión integral que articula teoría, análisis y práctica pedagógica. En este sentido, el componente de Aprendizaje Práctico Experimental (APE) garantiza la aplicación activa de los contenidos. En el primer bloque, los estudiantes diseñan talleres de lectura y escritura creativa, integrando el análisis de textos con propuestas de enseñanza. En el segundo, realizan un ejercicio de «análisis crítico evolutivo», aplicando distintas metodologías históricas a una misma obra y valorando sus alcances interpretativos. La asignatura fomenta, además de competencias disciplinares, el desarrollo de habilidades blandas esenciales para la formación docente: pensamiento crítico, responsabilidad y resiliencia en la resolución de problemas, trabajo colaborativo en la planificación de proyectos y ética profesional en la construcción de propuestas educativas. En conjunto, Introducción a los Estudios Literarios sienta las bases conceptuales y metodológicas para el análisis y la enseñanza de la literatura, vinculando el saber académico con la práctica pedagógica y el compromiso social.